Qué ropa llevar a Laponia:
guía completa para no pasar ni una pizca de frío
Viajar a Laponia es adentrarse en un mundo de nieve, magia y temperaturas que pueden alcanzar los -30 ºC. Para disfrutar a tope de esta experiencia única sin congelarte, es fundamental saber cómo vestirse bien. Aquí te traemos una guía completísima basada en el sistema de capas, con trucos muy útiles y detalles que a veces se os pueden pasar por alto, como la protección de baterías y dispositivos.
Además, muchos de
nuestros viajes organizados a Laponia
incluyen la ropa térmica necesaria, tanto para adultos como para peques. Así que no tendréis que volveros locos buscando ropa especial por vuestra cuenta.


1. Entiende el sistema de capas (la clave para no congelaros)
La clave está en vestirse por capas. Nada de poneros lo primero que pilléis del armario: os contamos cómo abrigaros bien para estar a gusto, calentitos y disfrutar sin problema:
Capa base (interior):
Su función es manteneros secos. Usad camisetas térmicas ajustadas y mallas interiores de lana merino o tejidos técnicos como DryFit o Icebreaker. Evitad el algodón, que se empapa y os deja fríos.
Capa intermedia (aislante):
Es la que retiene el calor. Optad por un forro polar grueso o un plumífero ligero tipo Patagonia Nano Puff o Decathlon Trek 900. Esta capa debe ser cálida pero no tan voluminosa como para dificultar el movimiento.

Capa externa (protección):
Tiene que ser impermeable, cortavientos y transpirable. Lo ideal: un buen anorak de esquí con capucha (tipo Columbia, The North Face o Helly Hansen) y pantalones de nieve con forro térmico y ajuste en los tobillos para evitar que entre la nieve. Esta capa os salvará del viento y de la humedad incluso en actividades como moto de nieve o trineo.
2. Pies calientes, viaje redondo

Calcetines térmicos (sí, mejor si son de lana merino).

Botas impermeables con buena suela antideslizante. Que sean de nieve, nada de botas de montaña ligeras.

Plantillas aislantes para que el frío del suelo no os cale.
3. Manos, rostro y cabeza bien protegidos
En temperaturas bajo cero, proteger las extremidades y la cara es vital. Son las zonas que más rápido pierden calor, y si no vais bien equipados, lo notaréis enseguida. Aquí va lo que no puede faltar:
Guantes:
Llevad dos pares: unos interiores térmicos ajustados (tipo Decathlon Wedze o Black Diamond Lightweight) y unos exteriores impermeables gruesos tipo manopla (como los de esquí o alpinismo).
Gorro:
Que sea de lana o tejido térmico, y que cubra bien las orejas. Si lleva forro polar interior, mucho mejor. Los gorros con orejeras o los que se ajustan al cuello con velcro son muy útiles en excursiones largas.
Braga polar o pasamontañas:
Proteged la boca, la nariz y parte del cuello. Un buen pasamontañas (balaclava) os servirá también bajo el casco si hacéis actividades como moto de nieve. Las bragas tipo Buff térmicas también son súper prácticas.
Gafas de nieve o ventisca:
Imprescindibles para proteger los ojos del viento helado y la luz blanca de la nieve. Sobre todo si vais a montar en moto de nieve, hacer esquí o hay previsión de ventisca. Modelos con cristales fotocromáticos o antiempañantes os darán mejor visibilidad
4. Proteged vuestros dispositivos: el frío y las baterías no se llevan bien
5. Bonus: otros imprescindibles que no os podéis dejar
¿Vais con niños? Misma regla: capas y más capas
Los peques son los primeros en notar el frío. En muchos de nuestros viajes os prestan monos térmicos para ellos, pero aseguráos de llevarles también:
Conclusión: prepárate bien y disfruta de una aventura inolvidable en Laponia
Laponia es un destino único donde la nieve, la naturaleza y la magia navideña lo envuelven todo. Si os preparáis bien, el frío no será ningún problema, ¡al contrario! Iréis cómodos, tranquilos y podréis disfrutar de cada momento.
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